Mostrando las entradas con la etiqueta #reflexion. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta #reflexion. Mostrar todas las entradas

La sucia zona de confort

¿Alguna vez han escuchado de la zona de confort y de lo difícil que es salir de ella? No es coincidencia que gente que ha sufrido en extremo desde de niño y/o adolescente mientras va madurando hacen lo que sea para cambiar su vida, acciones que personas con una vida "normal" no harían, porque no arriesgarían su posición actual,  por más que estén sufriendo ya que no han llegado a su límite y aún pueden soportar, o eso se suele creer. Y digo esto porque cada quien tiene un límite de resistencia diferente, donde unos pueden encontrarse sufriendo para otros suele afectarles menos o simplemente darles igual; pero siempre se intenta cambiar cuando se ha llegado al límite y hablo del límite propio de cada quien.
¿ Y es que hay que estar al borde de nuestro propio abismo para querer cambiar? Al parecer muchas veces si, necesitamos tocar fondo para poder salir de esa situación que tanto daño nos hace, supongo que también la fe y la esperanza juegan el rol cómplices para que no se quiera salir de la zona de confort. Por que siempre sé espera que la situación cambie por obra y arte de magia, sin que se tenga que mover ni un solo dedo. Y esas cosas no pasan, solo en la ficción.

Hay dos pensamientos a los que podemos recurrir para poder salir de ahí: 
Uno de ellos es pensar en que tu vida podría ser mejor que lo que te está pasando, se debe dejar de culpar al resto por la infelicidad que llevas y empezar a hacer tus propios cambios; por que desde el momento que uno se da cuenta de que la vida es de nosotros mismos y de nadie más, dependerá únicamente de nosotros ser feliz, esta es la opción positiva pero no es para todos por eso mencionaré la segunda forma de pensar.

Por otro lado la segunda opción se centra en que es mejor ante ponerse a las situaciones, y pensar en ¿Qué pasaría luego si me hace daño?, ¿Qué sucederá después si sigo permitiendo esto conmigo?, las respuestas tienen que ser trágicas para que ayude, si, se puede pensar que se tiene tendencia a ser fatalista, pero acaso ¿tu situación no lo es?, o quizá no lo es tanto y no hay que llegar a esos extremos, pero ¿si lo es?, yo no lo sé, cada quien conoce lo que lleva dentro.
Como por ejemplo si tu pareja te maltrata verbalmente podrías anteponerte a que podría pasar luego, porque ya sabes, el maltrato verbal es el preludio de muchos crímenes. No hay que esperar que aparezcan las humillaciones públicas o los golpes para recién empezar actuar, hay que anteponerse. No estamos para esperar cambios de nadie más que de nosotros mismos. Siempre lo he dicho nadie cambia por alguien, si ese alguien quiere cambiar lo hará por si mismo o sea por beneficio propio.

Y sé que aunque he dado dos opciones mucha gente dirá "Eso ya lo he pensado pero aún así no me animo a salir de mi zona de confort"
Debo ser sincera y decir que el miedo siempre existirá como parte del cambio pero ¿Qué es peor a no intentarlo?, solo piensa llegar a la ancianidad sin haber siquiera intentado ser feliz, por que al menos si no lo logras puedes decir: "yo quise ser feliz, lo intente, hice cambios en mi vida", y podrás sentir aunque sea una gota de alivio.
Poco sé yo cómo funciona esta vida, soy muy joven para aconsejar o dejarles alguna reflexión que pueda ayudar inequívocamente en sus vidas, pero me he dado cuenta de que un pequeño cambio de frecuencia, un corto salto a la duda, un espasmo de miedo en el pecho pueden hacer que las cadenas de la sucia zona de confort se rompan para siempre.

¿Nos estamos consumiendo?

¿No entiendo como se puede vivir en una mentira?, sí, es una mentira, aunque no se sepa la verdad; es una falacia, porque nada de lo que nos han enseñado nos llena, nada nos hace sentir completos y seguimos cayendo en el abismo de la miseria física y mental.

Supuestamente necesitamos ¿Ropa costosa y de temporada para verme bien?, ¿Tecnología para estar en tendencia?, ¿Comida chatarra para presumir?, ¿Viajes costosos para sentirme libre?, ¿Cirugía innecesaria para atraer miradas?, ¿Hacer ejercicio extenuante solo para aumentar el ego?, esto, y un sinfín de cosas.
¿Realmente es necesario encajar?, ¿Nos hace feliz?, ¿Te hace feliz?, quizá si, por un momento, pero luego ¿Qué viene?, siempre quieres más y más...porque lo que ahora tienes ya no es suficiente, porque hay alguien, algo, que quiere que tú seas así.

Y que hablar del que tienes que estudiar por largos años para pagar deudas que tu mismo generas al gastar en cosas innecesarias, para pagar los estudios de tus hijos, esos hijos que tanto te insistió la sociedad que tuvieras, y no hay que olvidarnos de los lujos para impresionar o consentir a la pareja, ¿Eso te llena?, quizá, pero solo por un tiempo.

Tocar el tema de los hijos es delicado, yo sé, es decisión de cada quien, es totalmente indiscutible; pero está bien, tienes suerte si no te presionaron si solo se te chispoteo o lo planeaste con mucha ilusión, que sería lo más adecuado. Gastar en los hijos es lo más gratificante y a la vez exhaustivo, siempre se querrá dar lo mejor, pero no siempre se podrá, sobre todo para la clase media y la clase baja, que somos la mayoría, el principal problema es que la educación debería ser gratuita,  ¿Por qué tiene que costar tanto si supuestamente beneficiaria al país?

¿Y si ir contra el sistema es ir contra uno mismo? Porque todo lo propuesto ha sido por nuestro bien, para mantenernos a raya, con mentiras pero disciplinados, con prejuicios que hieren pero complaciendo al prójimo, con el patriarcado atado pero complaciendo a la familia, siguiendo las reglas por miedo a ser castigados, es triste que sea el miedo el que te detenga y no tu propia conciencia. ¿En serio vivir así nos hace feliz?, espero que se entienda que hablo de las religiones. 

He pensado en las noches de insomnio que quizá el problema no son ellos, quizá, por dentro nosotros mismos, ese hambre de insatisfacción nos vuelve presos, ese deseo de querer ser más, de querer tener más nos corta las alas. Pero ya sabes, el conformismo está visto como lo peor, desde niños nos dicen, "tú tienes que ser el mejor", "no seas un mediocre", ahora nos lo decimos a nosotros mismos para no olvidarlo, o envenenamos a los más pequeños como nos enseñaron.

Esa obligación que ni siquiera puede ser vista, nos adormece el pensamiento, por eso le rehuyes a la duda, cuando lo lees en algún lado, cuando alguien más te lo cuenta, o lo escuchas por ahí, llegas a reflexionar inconscientemente por un corto instante porque esta dentro de ti filosofar aunque lo quieras esconder, pero callas, es raro compartirlo, nadie habla de eso, si eres valiente y lo cuentas te tildaran de loco o conspiranoico, dudo que todos, pero los habrá.
Somos pocos los que volamos por largo rato en nuestra mente sin sentir incomodidad porque ya es costumbre, pero hay que estar sentado al otro lado de la acera para poder darse cuenta de que vivimos y a la vez no estamos.

A veces odio no tener respuestas para mis muchas preguntas, ni dios Google ha podido resolver mis extrañas incógnitas. Pero cuestionarme ha sido como comprarme un par de alas para revolotear un rato en la cara de los que me han querido oprimir con sus falsas creencias.
Y sé que no importa si ahora no se sabe la verdad, porque solo basta con dudar un poco para cambiar el mundo, o bueno al menos, tu propio mundo.

los mejores cuentos infantiles

  "Alicia en el País de las Maravillas" de Lewis Carroll: Las aventuras de Alicia en un mundo surreal y mágico son un clásico de l...